Testeo WLTP
Testeo WLTP
Los Procedimientos mundiales armonizados de testeo de vehículos ligeros (WLTP, por sus siglas en inglés) reemplazan los testeos en virtud del Nuevo ciclo de conducción europeo (NEDC), aplicables hasta el 1 de septiembre de 2018. Los testeos tanto viejos como nuevos están diseñados para medir las emisiones y el consumo de combustible. El ciclo de testeo WLTP se basa en datos en tiempo real recopilados a nivel mundial durante el uso en la carretera, que brindan una mejor representación de los perfiles de conducción cotidianos. Todos los vehículos producidos para el mercado de la UE cuentan con un Certificado de Conformidad (el documento CoC) que, entre otra información, incluye los valores de emisión de CO2 de la prueba de laboratorio. Sobre la base de este documento, se puede registrar el vehículo en cualquier lugar de Europa.
Fundamentos sobre cuestiones técnicas
WLTP son las siglas en inglés de Worldwide Harmonized Light-Duty Vehicles Test Procedure («procedimiento mundial armonizado de ensayos para vehículos ligeros»). El procedimiento de prueba para valores de consumo y emisiones de gases es válido para las nuevas homologaciones de las categorías M y N1 en la Unión Europea desde el 1 de septiembre de 2017, y es obligatorio para nuevos vehículos desde el 1 de septiembre de 2018.
NCCE son las siglas de «nuevo ciclo de conducción europeo»; hasta ahora, era el ciclo de comprobación válido para la determinación de los valores de consumo y emisiones de gases.
Si el NCCE determinaba los valores de prueba por medio de un perfil de conducción sintético, el ciclo WLTP toma como referencia datos de tráfico real determinados en todo el mundo. Por este motivo, el WLTP conforma mejor los perfiles cotidianos de conducción.
El NCCE consta de dos fases de perfiles de conducción: urbano y extraurbano; de ellos se obtienen los valores combinados de consumo y de CO2. En cambio, el ciclo de conducción WLTP se divide en cuatro fases con distintos perfiles de aceleración y velocidad: low (baja), medium (media), high (alta) y extra high (extremadamente alta). Cada fase consta de múltiples subfases de conducción, parada, aceleración y frenado.
Además del perfil de conducción, con el WLTP se han modificado los procedimientos de medición, que se han adaptado a la tecnología de los vehículos actuales. Se han limitado más estrictamente los márgenes de medición y tolerancia, p. ej., la temperatura a la que deben efectuarse las mediciones en un vehículo o el nivel de presión de los neumáticos que se debe ajustar.
El nuevo ciclo de prueba y el nuevo procedimiento de ensayo se caracterizan por los siguientes atributos:
- comportamiento de conducción más realista;
- mayor margen de velocidades y tipos de velocidades de conducción (conducción urbana, extraurbana, en autopistas), lo que permite facilitar al consumidor datos concretos de consumo de combustible para cada tipo de velocidad en el marco de las pruebas WLTP;
- recorridos de prueba más largos;
- temperaturas ambientales más realistas y cercanas a la media europea;
- velocidades medias y puntas más elevadas;
- procesos más dinámicos y representativos de aceleración y frenado;
- menos tiempo en parada en relación con la longitud del ciclo;
- toma en consideración el equipamiento especial: indicación de los valores de consumo de combustible y de emisiones de CO2 para cada vehículo individualmente configurado, tomando en consideración el equipamiento adicional (spoiler, techo corredizo, enganche para remolque, etc.);
acotamiento de las tolerancias de medición.
Con estas modificaciones, el WLTP ofrece una base más realista para la determinación de los datos de consumo y de emisiones de los vehículos.
Las pruebas WLTP se han desarrollado con el objetivo de armonizar, como procedimiento de ensayo global, la determinación de los datos de consumo de combustible y de las emisiones de CO2 y otras sustancias nocivas.
El WLTP representa las condiciones dadas en la carretera de forma más realista que el NCCE. No obstante, no es posible abarcar todas las posibles variaciones. Además, algunos conductores tienen un estilo de conducción marcadamente propio: donde algunos aceleran rápidamente, toman las curvas a toda velocidad o frenan abruptamente, otros conducen de forma más defensiva. En condiciones de uso reales, también entran en juego otras condiciones, como la situación meteorológica (p. ej., viento de cara, temperaturas variables), el uso (p. ej., a plena carga o con remolque), los consumidores secundarios (p. ej., la radio o el sistema de climatización) y los perfiles del trayecto (p. ej., viajes cortos, exclusivamente por autopista, etc.); todas ellas influyen de forma específica en el consumo.
Habida cuenta de las diferencias llamadas a surgir también en el futuro en relación con los comportamientos de conducción, la situación del tráfico y las condiciones meteorológicas en cada país específico, seguirán existiendo divergencias entre las emisiones y los valores de consumo reales y los medidos en condiciones de laboratorio. Sin embargo, dado que en la práctica no existe un único valor «real» de consumo y emisiones, con los valores de medición de pruebas estandarizadas de laboratorio es posible comprobar directamente las emisiones y el consumo de combustible de distintos modelos de diferentes fabricantes de automóviles.
En las pruebas de laboratorio para la homologación europea de automóviles utilitarios, se miden las emisiones de CO2 directamente dependientes del consumo de combustible, la emisión de sustancias nocivas y los valores de consumo de energía de las fuentes de propulsión alternativas, incluidos los vehículos de propulsión eléctrica.
Las pruebas de laboratorio desempeñan un papel decisivo en el procedimiento de introducción de un vehículo a motor en el mercado de la UE. Antes de salir al mercado, los vehículos deben superar determinadas pruebas llevadas a cabo por un servicio técnico de conformidad con la legislación europea. Si se cumplen todos los requisitos relevantes para la homologación, una autoridad nacional emitirá un certificado de homologación UE en virtud del cual se autoriza la venta del tipo de vehículo de motor en la UE. Hay disponible un certificado de conformidad para cada vehículo producido en la UE (denominado por sus siglas en inglés CoC, Certificate of Conformity) que consta, entre otros datos, de los valores de emisiones de CO2 de las pruebas de laboratorio. Sobre la base de este documento, es posible la matriculación del vehículo en cualquier parte de Europa.
A fin de que los automovilistas puedan tomar una decisión fundamentada sobre la base del consumo de combustible, los concesionarios y fabricantes ponen a disposición de los consumidores información relevante, como una identificación (etiqueta) de las emisiones de CO2 y el consumo de combustible de cada utilitario, que está visible en los espacios de ventas de la práctica totalidad de los vehículos nuevos. El diseño de esta etiqueta se decide a nivel nacional y varía entre distintos países. No obstante, todas las etiquetas incluyen los valores de CO2 de las pruebas estandarizadas de laboratorio, tal y como figuran en el certificado de conformidad (CoC).
Cuando, en un estado miembro de la UE, la cuantía del impuesto de matriculación (pago único) o del impuesto sobre los vehículos de motor (anual) depende de las emisiones de CO2 del vehículo en cuestión, el gravamen depende de los valores de 2 de las pruebas de laboratorio que figuran en el certificado de conformidad (CoC).
II. Cuestiones de relevancia para los clientes
En la práctica, el consumo de combustible no cambia. Por lo general, las pruebas WLTP dan como resultado, para un mismo vehículo, valores más elevados de consumo de combustible y de CO2 que las pruebas NCCE; esto se debe a que los perfiles de conducción y las condiciones umbral de medición (velocidades máximas, dinámica, etc.) varían en sendos ciclos de pruebas. Esto supone que las condiciones actuales de tráfico están mejor representadas en el WLTP que en el NCCE. A causa de la modificación de los métodos de medición, el valor de CO2 según WLTP es superior al consumo real del cliente.
El paquete legislativo del WLTP cuenta con plena validez legal desde el 27 de julio de 2017; esto significa que los nuevos tipos de vehículos se tipifican según el WLTP desde el 1 de septiembre de 2017. Desde el 1 de septiembre de 2018, se tipifican todos los nuevos vehículos (nuevas matriculaciones) según el WLTP. Los certificados de conformidad (documento CoC) emitidos a partir del 01.01.2023 sólo contienen valores WLTP y ya no valores NEDC.
Puede encontrar los valores WLTP actuales para cada modelo en la página web del modelo. Los valores específicos para la configuración de su vehículo se pueden encontrar en el configurador de vehículos (Car Configurator), además, de en el Certificado de Conformidad (documento CoC) de su vehículo.
No estamos en condiciones de facilitar garantía adicional alguna en relación con posibles cambios en las condiciones marco jurídicas o regionales.
En estricto cumplimiento de nuestros requisitos de calidad y seguridad, actualmente no es posible reequipar un
Un filtro de partículas de gasolina, como su nombre indica, es un filtro de partículas para motores de gasolina que permite reducir las emisiones de partículas finas de hollín.
En el pasado, los filtros de partículas solo se utilizaban con los motores diésel; en cualquier caso, la técnica de inyección directa de gasolina, de uso cada vez más común en motores de gasolina, aumenta las emisiones de partículas en comparación con la inyección por tubo de admisión. Al inyectarse el lubricante directamente en la cámara de combustión, pueden precipitar en las paredes de los cilindros, los émbolos o las válvulas pequeñas gotas que se queman solo parcialmente y permanecen en forma de ínfimas partículas de hollín.
Al igual que ocurre con los filtros de partículas ya empleados en los vehículos diésel, no se esperan limitaciones en la vida útil de los vehículos de gasolina con un filtro de partículas.
No se prevé ni se requiere ningún mantenimiento. No se producen efectos sobre la vida útil del motor porque se mantienen los umbrales mecánicos y termodinámicos del conjunto. La regeneración del filtro suele suceder de forma pasiva, sin que el conductor tenga constancia de ello. Los parámetros de funcionamiento del motor solo se adaptan activamente en caso de que se hagan usos largos del vehículo a muy baja carga del motor en combinación con trayectos cortos y muchos arranques en frío, para que pueda producirse la regeneración (p. ej., aumento del régimen de conmutación).
En la actualidad, todos nuestros vehículos con motores de gasolina incorporan un filtro de partículas.
Note que en este momento no podemos hacer ninguna declaración específica sobre una posible modificación a los vehículos ya registrados con respecto a las actualizaciones de modelos. Sin embargo, puede estar seguro de que
Al indicar las cifras de consumo,
No. Son aplicables en cada caso las disposiciones vigentes en el momento de la matriculación
No. Son aplicables en cada caso las disposiciones vigentes en el momento de la matriculación.
El consumo real depende, en cada caso, de diversas condiciones (como la temperatura exterior, la situación del tráfico, el modo de conducción o la presión atmosférica, entre otras). Sin embargo, se espera que el WLTP permita obtener valores de consumo y emisiones de CO2 más realistas.
RDE son las siglas en inglés de Real Driving Emission («emisiones de conducción reales»). Se trata de un método de medición de emisiones de óxido de nitrógeno y de la cantidad de partículas en condiciones reales de conducción.
Additional Information on testing transparency according to the Regulation (EU) 2017/1151 as amended by 2023/443 Point 5.9 of Annex II of the European Union can be found within the "Technical Service Information" online application. If you have any questions, please contact piwisadmin@porsche.de.